Sé que cada vez se está prestando más atención a esto, pero creo que es fundamental que desde niños se nos ofrezca formación financiera.
Posiblemente escriba de vez en cuando posts con algunas cosillas que voy aprendiendo sobre este tema, en el que soy profundamente ignorante.
Voy por la primera, de Warren Buffet, casi nadie: solamente lamenta no haber empezado a invertir antes. Así que ya sabes: comienza a invertir en cuanto puedas.
En Samos, antiguamente Sámanos, en la provincia de Lugo y a la vera del río Sarria, se encuentra el monasterio habitado más antiguo de España, al menos trescientos años antes de que la tumba de Santiago provocara la formación de ese Camino que nos trajo arte, cultura y riqueza económica, y que también pasa por Samos.
En uno de sus bellos claustros, una clave en el techo nos lanza, burlona, un mensaje que se ha puesto de moda en estos días del mundial de Catar.
La morgue, ese lugar en donde los cadáveres esperan para ser reconocidos, tiene un nombre que siempre me ha resultado muy curioso.
Proviene del francés morgue, que significa para mirar solemnemente y era, en un principio, el lugar en donde los presos recién llegados a la cárcel esperaban para ser conocidos por sus guardianes.
Quienes seguís este humilde blog sabéis bien de nuestra admiración por la ciencia, de la importancia de referentes femeninos y de nuestro aplauso por el buen hacer de Educativos Casio. Conocéis también la bonita serie Científicas Casio, en la que mujeres referentes en los distintos campos de la Ciencia son destacadas en ese instrumento diario de trabajo: las calculadoras científicas.
Recientemente se han incorporado tres científicas más a esa colección cada vez más larga:
Irène Joliot-Curie, hija mayor de Marie Curie y Pierre, premio Nobel de Química y que hizo también suya la causa de los derechos de la mujer. Me gusta destacar de Irène que mantuvo su apellido tras casarse. Vivió durante la primera mitad del siglo XX (1897-1956) y su principal contribución a la ciencia fue la síntesis de productos radiactivos. Olalla Ruiz nos la representa como veis a continuación. El modelo de calculadora disponible con esta ilustración es el fx-570SPXII.
María Antònia Canals i Tolosa, recientemente fallecida (1930-2022), maestra cuya principal contribución se centró en la pedagogía de las Matemáticas, esa preciosa ciencia que en muchos casos se atraganta a nuestros niños. Ejerció también una importante labor social, centrándose en los alumnos menos favorecidos. La encargada de su ilustración es Srta M (que es la identidad secretísima de Manuela López). Los modelos de calculadora disponible con esta ilustración son el fx-570SPXII y el fx-82SPXII.
Nerea Luis Mingueza: doctora en Ciencias de la Computación y experta en Inteligencia Artificial y Robótica, en ese futuro que ya es presente, y fascinada por la informática y la tecnología. Nacida en 1991 es, como veis, la más reciente de las tres nuevas incorporaciones. La ilustración, tanto de Nerea como de su compañerito, es de Ana Belén Rivero. Los modelos de calculadora disponible con esta ilustración son el fx-570SPXII y el fx-82SPXII.
Como siempre, mil gracias a Casio Educativos, mil gracias a esa encantadora persona que es su responsable de marketing, Eloy Bernal, por su extraordinario trabajo y por esa labor de que cada vez los referentes femeninos en ciencia sean más habituales.
Hace aproximadamente un siglo, una jovencita de Moaña que servía en Vigo vio cómo su vida iba a cambiar de la noche a la mañana: los señores para los que trabajaba habían decidido emigrar a Buenos Aires y querían llevarla consigo, puesto que estaban felices con su trabajo.
Acudieron a pedir permiso a los padres de la joven; los padres accedieron -no olvidemos que, en aquellos tiempos, emigrar a América era equivalente a no volver jamás-, con la condición de que otra hermana la acompañara.
Así fue cómo mis tías abuelas Peregrina y Teresa dejaron Galicia -para no volver nunca más- y comenzar una vida allá, en Buenos Aires.
Por fortuna, seguimos manteniendo contacto con esa parte maravillosa de la familia que vive en Argentina. Imposible no sentirlos cerca; imposible no alegrarnos -o no sufrir, según lo que toque- con esa final entre Argentina y Francia, dos selecciones habitualmente pobladas de emigrantes (italianos y españoles la primera, africanos la segunda).
Hoy os traigo una deliciosa conversación, cortesía de la Fundación Juan March en su Canal March, entre José María Alfaro y Álvaro Cunqueiro.
En ella, mi admirado mindoniense nos habla de Galicia con su mirada única; nos habla de trovadores, de finisterres y de ríos del olvido; nos habla de los lobos y nos habla de nuestra alma; nos habla de normandos, de obispos y de avemarías.
Muchas veces, en este mundo de premios y castigos, no vemos con buenos ojos los errores. Pero los errores, además de castigo -allá en donde tales métodos se usen- traen siempre consigo su consecuencia.
Cada error nos sirve:
para saber qué hemos hecho mal
para entender por qué debemos hacerlo de otro modo
para afianzar la compresión de la tarea o el problema a resolver
(a nuestro supervisor) para entender nuestra forma de pensar
Valoremos siempre los errores, esos escalones hacia la cumbre.
En el año 1679, la ciudad de Viena sufrió una gran epidemia de peste (no era la primera vez que sufría plagas de ese estilo; de hecho, muerte vienesa era otro de los nombres que se daba a la peste).
El emperador, Leopoldo I, en su huida de la ciudad por la epidemia, juró erigir una columna votiva si la peste se terminaba. Y ese mismo año, ya había una columna de madera, representando a la Santísima Trinidad, obra de Johann Frühwirth.
Años después (1683) se decidió convertir esa columna en un monumento de mármol, y el proyecto se asignó al que en este post indico como autor: Matthias Rauchmüller; no consiguió terminarla (murió en 1686) y otros autores se hicieron cargo del proyecto: Fischer von Erlanch, Strudel, Burnacini, Kracker y Bendel. Se completó en 1693, diez años después de su comienzo y casi quince años después de aquella terrible epidemia que se llevó a 76.000 vieneses.