Disfrutaremos hoy de este poema medieval, al que llegué intentando localizar uno de los muchos que la bisabuela de mis hijos, Uba, recitaba.
El rey moro tiene un hijo que Tranquilo se llamaba y también tiene una hija que se llamaba Altamara. La quieren ricos y condes, la quiere el rey de Granada y hasta un hermano que tiene ha intentado de gozarla. Por gozar de su hermosura cayó enfermito en la cama. Su padre que lo ha sabido a preguntarle se halla: ¿Qué te pasa, hijo mío? ¿Qué tienes que estás en cama? - Calentura, padre mío una calentura vana. - ¿Quiés que te traiga de almuerzo la pechuga de una pava, las alas de una gallina?. Que te lo guise Altamara. - Que Altamara me lo guise y Altamara me lo traiga que Altamara venga sola, que no venga acompañada, que también las compañías a veces salen muy malas. Por la escalerita arriba sube la linda Altamara derechita como un huso, reluce como una espada; en la su mano derecha lleva la pava guisada y en la su mano izquierda llevaba una jarra de agua, y en el su brazo derecho llevaba una toalla. - Buenos días, hermanito, ¿Qué tienes que estás en cama? - Las malezas que yo tengo tras de tus ojillos andan. - Permita Dios de los cielos te levantes de la cama. Se tiró desesperado como un león cuando brama, hizo lo que quiso de ella, hasta escupirla en la cara. Pendientes de sus orejas por la escalera rodaban; anillitos de sus dedos en ella nada paraban. A eso de los nueve meses cayó enfermita en la cama, su padre que lo ha sabido a preguntarla se halla: - No te asustes hija mía, no te asustes Altamara, que si es que tienes un hijo será príncipe de España y si tienes una hija monjita de Santa Clara. - Vaya razones de un padre; vaya unas razones, vaya. Se ha encerrado en su cuarto se ha dado de puñaladas. - Prefiero morír así y no vivir deshorada, y los niños de mi escuela me llamen mujer mundana.
Esta variante lingüística parece tener su base en la mezcla, producida durante la repoblación de la franja del Duero, entre el gallego y el castellano antiguo. Se conoce también como briquería o briquero, y pasó a ser -ya en los siglos XIX y XX- una jerga profesional entre los fabricantes de aperos de labranza y tratantes de ganado.
Tiene su núcleo principal en Cantalejo y, aunque no es lengua oficial, sí que alguna señalización lo usa como lengua.
Me he enterado hoy de esta bonita curiosidad, y quería contárosla.
Esta catedral, caracterizada por su robusta -e inacabada- torre, es un ejemplo de gótico brabantino, también llamado alto gótico y ubicado en Brabante, esa región que conocemos gracias a Genoveva.
Es precisamente la presencia de una única torre una de las características diferenciadoras de ese gótico, aunque siempre -casi siempre- resulta difícil encontrar un estilo uniforme en obras que requerían siglos para completarse, como podéis suponer.
Imagínate que hay una persona muy violenta, que desea dar puñetazos en la cara a la gente. Imagínate también que tú necesitas el dinero y que llegas a un acuerdo con esa persona para que te dé cuatro puñetazos y tú le cobras 100€ por ello.
Es evidente que no se puede hablar de consentimiento, pero más evidente aún es que esa persona te está agrediendo.
Pues con la prostitución, lo mismo.
Me ha tocado hoy esgrimir este argumento en una conversación. Me pregunto -espero que sí- si veremos el momento en el que el “uso de los servicios de prostitución” sea contemplado como una violación.
Os indico estas recomendaciones de ChatGPT, aunque quizá lo de “poco conocido” sea muy relativo. Desde luego, una colección de diecinueve lugares que merecen mucho la pena:
1. Andalucía: Setenil de las Bodegas (Cádiz)
Un pueblo singular donde las casas están construidas bajo enormes rocas, dando la sensación de que la naturaleza forma parte de las viviendas.
2. Aragón: Albarracín (Teruel)
Este pueblo medieval está perfectamente conservado, con sus calles empedradas y casas de tonos rojizos, rodeado de naturaleza impresionante.
3. Asturias: La Cuevona (Ribadesella)
Una aldea a la que se accede por una cueva natural, rodeada de vegetación, es un lugar que parece sacado de un cuento.
4. Cantabria: Valle del Pas
Este valle poco conocido ofrece paisajes verdes y tranquilos, ideales para hacer rutas de senderismo y disfrutar de la cultura pasiega.
5. Castilla-La Mancha: Lagunas de Ruidera (Ciudad Real y Albacete)
Un paraíso natural de lagunas conectadas entre sí, rodeadas de montañas y vegetación, perfectas para hacer senderismo y bañarse en verano.
6. Castilla y León: Las Médulas (León)
Un paisaje impresionante creado por la antigua minería romana, con montañas de tierra rojiza que contrastan con la vegetación verde.
7. Cataluña: Tavertet (Barcelona)
Un pequeño pueblo con vistas espectaculares al pantano de Sau, rodeado de acantilados y montañas, ideal para una escapada tranquila.
8. Extremadura: Garganta de los Infiernos (Cáceres)
Un paraje natural en la comarca de La Vera, con piscinas naturales y cascadas formadas por el río Jerte, perfecto para disfrutar de la naturaleza.
9. Galicia: Fragas do Eume (A Coruña)
Un bosque atlántico primario, donde la frondosa vegetación y los ríos crean un ambiente mágico. Ideal para caminatas y observar fauna.
10. Islas Baleares: Cala Figuera (Mallorca)
Un pequeño puerto pesquero con aguas cristalinas y un ambiente tranquilo, perfecto para quienes buscan disfrutar de la costa sin las aglomeraciones.
11. Islas Canarias: Garachico (Tenerife)
Este pueblo ofrece tranquilidad y unas piscinas naturales volcánicas para bañarse, además de su historia como antiguo puerto.
12. La Rioja: Cañón del Río Leza
Un paisaje natural impresionante con un cañón de roca caliza y la oportunidad de ver buitres y otras aves rapaces.
13. Madrid: Patones de Arriba
Un pequeño y pintoresco pueblo de calles empedradas y casas de pizarra, rodeado de naturaleza, perfecto para una escapada cercana a la capital.
14. Murcia: Cabo de Palos
Un faro icónico rodeado de calas y acantilados, ideal para bucear o hacer senderismo, menos concurrido que otras zonas de la costa murciana.
15. Navarra: Selva de Irati
Uno de los mayores bosques de hayas y abetos de Europa, un paraíso natural que cambia de color con las estaciones y es perfecto para el senderismo.
16. País Vasco: San Juan de Gaztelugatxe (Bizkaia)
Una pequeña ermita en lo alto de un islote, conectada por un estrecho puente de piedra, rodeada de acantilados y el mar Cantábrico.
17. Comunidad Valenciana: Fuentes de Algar (Alicante)
Un paraje natural con cascadas y pozas de agua cristalina, ideal para nadar y disfrutar de la naturaleza en un entorno relajado.
Cada uno de estos lugares ofrece una experiencia única y menos masificada para descubrir la riqueza de las diferentes regiones de España.
18. Ceuta: Monte Hacho
Uno de los dos montes míticos que formaban las Columnas de Hércules, Monte Hacho ofrece unas vistas panorámicas impresionantes del estrecho de Gibraltar y la costa africana. Además, alberga el histórico fortín del Monte Hacho.
19. Melilla: Cueva del Conventico
Situada en la Ciudadela de Melilla, esta cueva histórica fue utilizada como refugio por la población durante los ataques piratas en los siglos XVI y XVII. Hoy en día, se puede visitar y ofrece una conexión directa con el pasado de la ciudad, además de unas vistas espectaculares del mar Mediterráneo.
Nos encontramos ante un reportaje periodístico, el relato de los diez días que Luis Alejandro Velasco permaneció vagando a la deriva, convertido en novela. Se publicó originalmente en el diario El Espectador, en 1955, durante catorce días consecutivos. Años más tarde, en 1970, volvió a publicarse, esta vez en forma de libro.
Según el autor, esta su primera obra es su libro favorito; según la crítica, se trata de su narración más perfecta; es un libro muy sencillo, yo lo leí con 11-12 años (tal vez debería releerlo, seguramente cuatro décadas después lo veo de forma diferente).
Os recomiendo su lectura (sí, para cualquier edad).