Soneto XXIII, de Garcilaso de la Vega

En tanto que de rosa y azucena
se muestra la color en vuestro gesto,
y que vuestro mirar ardiente, honesto,
enciende el corazón y lo refrena;

y en tanto que el cabello, que en la vena
del oro se escogió, con vuelo presto,
por el hermoso cuello blanco, enhiesto,
el viento mueve, esparce y desordena;

coged de vuestra alegre primavera
el dulce fruto, antes que el tiempo airado
cubra de nieve la hermosa cumbre.

Marchitará la rosa el viento helado,
todo lo mudará la edad ligera,
por no hacer mudanza en su costumbre.

Garcilaso tenía una capacidad casi divina para transmitir, en los catorce versos de un soneto, sentimientos, reflexiones y bellezas con una pureza inigualable. Siempre me da la sensación de que en sus obras ni falta ni sobra nada.

He llegado hoy a esta joya gracias a la selección “Los 22 poemas más bonitos de la lengua española” que realizó Catalina Arancibia Durán. Muchas gracias y muchas enhorabuenas por ese trabajo.

Publicado en Poesía | Deja un comentario

Acertijo del viernes (6 de julio de 2023)

Nacido en la púrpura, pero nieto de un tabernero, pasó dos siglos con una flauta en la boca.

Publicado en Acertijos | Etiquetado , , | Deja un comentario

El sesgo del superviviente

En nuestra infancia los coches no tenían airbags, no llevábamos cinturón, íbamos cinco atrás… y aquí estamos ahora. En nuestra infancia los parques infantiles no tenían ese suelo tan blandito, y los columpios eran de hierro y con esquinas… y aquí estamos.

Efectivamente, estamos cayendo en el sesgo del superviviente: hablamos desde nuestra supervivencia, no contando los miles que morían, por ejemplo, en accidentes de coche cada año.

Publicado en Filosofía | Etiquetado , | Deja un comentario

“No sabía que era tan antiguo”

Esta fue la excusa -o el argumento, que aún me parece peor- que esgrimió la persona que hizo una pintada (su nombre y el de su novia) en el Anfiteatro Flavio, en el Coliseo de Roma.

Nunca achaques a la maldad lo que puedas achacar a la ignorancia, dice mi admirada Alicia. Pues necesitamos acabar con la ignorancia ya.

Publicado en El Cartapacio | Deja un comentario

La etimología de la palabra «bistec»

Esta palabra proviene directamente del inglés beefsteak (carne de vacuno); a su vez, beef proviene del francés antiguo boef (que ya nos lleva al latín bos, bovis).

Fuente: RAE

Publicado en El Cartapacio | Deja un comentario

No les grites a tus hijos

Por supuesto, no les grites salvo que sea necesario. Los gritos están para situaciones de alerta: “viene un león” o “vas a meter los dedos en el enchufe”, y no para “llegas tarde a clase” o “me has manchado la corbata de lejía”.

Dicho ello, casi nunca -por fortuna- son necesarios los gritos. Pero es que además, según escucho al maravilloso Álvaro Bilbao, susurrar obliga al escucharte a activar la corteza prefrontal, que nos permite focalizar.

Todo ventajas, pues: no agredimos, logramos más paz y, encima, logramos nuestro objetivo de que nos escuchen.

Publicado en El Cartapacio | Deja un comentario

La Indala Viajera

Suelo dedicar los domingos a publicar algo relacionado con viajes o turismo. Os quiero presentar hoy La Indala Viajera, las aventuras de una maravillosa familia viajera.

Son viajes sobre todo de naturaleza, disfrutando de preciosas rutas y acercándonos a la idiosincrasia de sus pueblos. Y nos cuentan el viaje con la familiaridad, el cariño y el detalle con los que se le contaría a un amigo.

Las rutas se centran sobre todo en Andalucía (y en el entorno de Málaga), así que puede ser un buen punto de partida si queréis visitar aquellas bonitas zonas. Pero incluso aunque no sea el caso, si eres amante de naturaleza y paisajes, te van a gustar, porque están plagadas de consejos y sugerencias tremendamente útiles.

Os recomiendo seguir su cuenta.

Publicado en Turismo, Viajes | Etiquetado , , , , , , | Deja un comentario

Nuestros consejeros los libros

Los libros son, entre mis consejeros, los que más me agradan, porque ni el temor ni la esperanza les impiden decirme lo que debo hacer.

— Alfonso V

Publicado en El Cartapacio | Deja un comentario

La empatía

La empatía o el “no es mi problema”. Mirad qué bonito aprendizaje nos deja este cuento:


Un ratón mirando por un agujero de la pared ve al granjero y su esposa abrir un paquete. Quedó aterrorizado al ver que era una trampa para ratones. Fue corriendo al patio a advertirle a todos.

¡Hay una ratonera en casa!.

La gallina que estaba cacareando y escarbando le dice: «disculpe, señor ratón, yo entiendo que es un gran problema para usted, pero a mí no me perjudica en nada», entonces fue hasta el cordero y le dice lo mismo: «disculpe señor ratón, pero no creo poder hacer algo mas que pedir por ud. en mis oraciones», el ratón se dirigió a la vaca y ella le dijo: «¿pero acaso estoy en peligro? ¡pienso que no! dijo la vaca»; el ratón volvió a la casa, preocupado y abatido para encarar a la ratonera del granjero.

Aquella noche se oyó un gran barullo como el de la ratonera atrapando su víctima, la mujer corrió a ver que había atrapado. En la oscuridad ella no vio que la ratonera atrapó la cola de una serpiente venenosa. La serpiente veloz mordió a la mujer, el granjero la llevó inmediatamente al hospital, ella volvió con fiebre alta.

El granjero para reconfortarla le preparó una nutritiva sopa, agarró el cuchillo y fue a buscar el ingrediente principal: la gallina; como la mujer no mejoró, los amigos y vecinos fueron a visitarlos, el granjero mató al cordero para alimentarlos; la mujer no mejoró y murió, el esposo vendió la vaca al matadero para cubrir los gastos del funeral.

El mundo no anda mal por la maldad de los malos sino por la apatía de los buenos.

Publicado en El Cartapacio | Deja un comentario

Los topónimos gallegos

Bueno. Ya estamos de nuevo -a raíz de una campaña publicitaria- con el debate de si Sanxenxo o Sangenjo, A Coruña o La Coruña, y demás.

Por una parte, tenemos claro que la legislación deja claros cuáles son los topónimos oficiales. Pero seamos honestos: esto no nos importa lo más mínimo. Si en el futuro -no lo quieran los dioses- se produjeran cambios en la legislación que establecieran como oficiales los topónimos en castellano, no pasaríamos a hablar de Sangenjo por ello. Así que no sirve como argumento el de la legislación (salvo que estemos en textos oficiales, lo cual no sucede ni en campañas publicitarias ni en el habla coloquial ni en los mapas de Google).

Por otro lado, los topónimos no se traducen. Quiero esto decir que esas bromas -geniales, debo decir- de Desván por Sobrado, San Ginés por Sanxenxo o Roblecito por Carballiño se quedan en bromas. Jamás en castellano se ha referido así nadie a esos lugares.

Finalmente -aquí está la enjundia-, cada lengua tiene su forma de referirse a los lugares. Nos da igual que la forma oficial sea London, Badajoz o Jaén, que en gallego decimos Londres, Badaxoz o Xaén. Y esto no es porque sea traducción (no buscamos el significado en el idioma origen y lo traducimos al gallego), sino porque en castellano se dice de un modo y en gallego de otro. Llegando al extremo, podríamos hablar de ese entrañable Capetón para referirse a Ciudad del Cabo (Cape Town).

Así que si en castellano el pueblo -que es quien crea las lenguas- se refiere principalmente a Sanxenxo como Sangenjo, así se va a quedar. Otra cosa es que hagamos campaña para que usen Sanxenxo, que estamos en nuestro derecho también.

Hasta la próxima, que seguro que este tema acaba volviendo. 🙂

Publicado en Galicia, Lenguaje, Política | Deja un comentario