El pánico como tal, no a mucho, pero sí veo unas cuantas costumbres que podríamos incorporar ya para siempre a nuestras vidas:
- Lavado de manos / toser en el codo / desechar los pañuelos desechables.
- Potenciar el teletrabajo.
- Potenciar la formación a distancia.
- Incrementar el uso de tarjetas de crédito frente a dinero en efectivo.