Para que no nos afecte el cambio de hora

Todos los años, en dos ocasiones, tenemos que modificar la hora de nuestros relojes, adelantando o retrasando la hora. Esto provoca múltiples incomodidades y, en el fondo, nos obliga a sufrir un pequeño jetlag en el que las horas de comidas y de sueños son las más afectadas.

Así que se me ha ocurrido esta propuesta, a ver qué os parece (para quien pueda -y quiera- aplicarla). Ya que dentro de poco tenemos que adelantar una hora nuestros relomóviles, ¿qué tal si vamos adelantando cada día cinco minutos, cómo lo veis?

Esta entrada ha sido publicada en Productividad, Propuestas, Psicología y etiquetada como . Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Time limit is exhausted. Please reload CAPTCHA.