Esto que os voy a contar es tan terrorífico como suena. Como podéis suponer, algunas de las personas que intentaron subir las cumbres del Himalaya perecieron en el intento. Y no todas se pudieron recuperar.
Así que esos cadáveres sirven de hito para quienes ascienden esas moles: el Saludador o Botas verdes son nombres habituales para los que acometen el reto de subir a los techos del mundo.