Deseado, no consentido

Qué poco estamos entendiendo si consideramos que el sexo debe ser consentido. ¿De verdad podemos caer tan bajo?

Esta entrada fue publicada en El Cartapacio. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Time limit is exhausted. Please reload CAPTCHA.