Esta obra del compositor ucraniano Sergei Prokofiev, basada en una fábula italiana de mediados del XVIII, nos cuenta la condena de un joven príncipe: debe viajar a lejanas tierras buscando tres naranjas. Tres naranjas que son, realmente, tres princesas. Pero no es el argumento el que trae esta ópera hoy aquí, sino su música. Y su parecido con la Marcha Imperial. Nos cuenta que inspiró a John Williams. ¿Qué opináis?